El Éxtasis corriendo por las venas, drogadazos mal, ellos bailan con la música en las venas. Ellos son la música. Bailan muy sensualmente, pegados. Pegados por la música y por la transpiración. Están vestidos de una manera extraña, con ropa dark-under. Ella con un corset negro, una pollera de tul rojo, las bucaneras rojas y negras. Él, todo de negro, la cara cubierta por un tul negro. Bailan y bailan hasta que los músculos gritan de dolor. Pero el Éxtasis en sus venas los silencia de inmediato.
El lugar está completamente oscuro. Sólo se ilumina de a momentos gracias a los frenéticos flashes que acompañan la múisica. Los lásers dibujan figuras extrañas en la atmósfera atestada de humo. Cada tanto se distinguen figuras humanas atacadas por los flashes y los lásers. Hay mucha gente. Hay mucha gente muy rara, pero a nadie le importa lo más mínimo lo que hace el otro. Todos están un mundo de Éxtasis.
El sonido entra por los oídos como un tren del Infierno destrozándolo todo. Pero ellos... ellos siguen bailando apretados y pegados. La transpiración es dulce. El aroma que flota entre ellos es dulce también. Y ellos bailan con esa música inyectada en el cerebro.
Llegan lo más lejos que el les permite el cuerpo, pero siguen bailando. Contentos. Pegados. Apretados. Y al final... Al final todos mueren de una sobredosis... en Amsterdam... en un club reve-under desconocido.
[Frank - Así me quiero morir yo... Me voy con toda la Gloria]
3 comentarios:
Así pasará... jojojo.
Me gustó.
Participé en tu desafío.
Buena idea.
un abrazo
Mariela
Hola fran! I´m back! me reincorporo de a poquito
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